El azar es la metafora perfecta, de quien le busca inspiracion a la tristeza, el destino es la cuartada sigilosa, de quien lo pretende todo y nunca acierta. Mientras el destino asoma su perfil, el presente se debate con la muerte, como quien se juega el todo por el todo. Como una moneda puesta al viento, jugando siempre, apostando siempre. A cara o cruz, ante la incrucijada revisas las cosas que pudieron pasar, y que se suspendieron por verlas girando en el viento. A cara o cruz, te jugaste los besos, los sueños, el llanto y la cordura mortal, de ignorar el futuro, y escoger al amor de tu vida. A cara o cruz, mientras que en la ventana se escurre el tiempo. Mientras la moneda da vueltas al viento, un beso te perfuma la existencia, mujer de corazon partido en dos, dime a cual mitad yo pertenezco. Lo que para ti es tremenda incrucijada, para mi es amar la incertidumbre, lo que para ti es borron y cuenta nueva, para mi es principio o final. Jugando siempre, apostando siempre.
domingo, 8 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario